Como propietario de uno o más gatos persas, probablemente te hayas preguntado cuál es la mejor alimentación para tu amigo peludo. El gato persa es ligeramente diferente a la mayoría de las razas de gatos; estos requieren una dieta específica para prevenir problemas de salud y mantener su pelaje en buenas condiciones.
Los gatos persas necesitan una dieta equilibrada que consista en alimentos húmedos y secos. Lo recomendable es dar alimentos húmedos por la mañana y por la noche y tener un tazón fresco de alimentos secos y agua limpia disponible en todo momento. La proteína también es muy importante para la alimentación de los gatos persas. Esto puede provenir de varias carnes, como pollo, carne de res, pavo, pescado, conejo o cerdo.
En esta publicación profundizaremos sobre los alimentos que debes evitar dar a tu gato y los alimentos a incluir para una dieta sana. Además, si quieres conocer los mejores alimentos recomendados por profesionales, echa un vistazo a nuestra guía completa de comidas para gatos persas donde damos mucha más información al respecto.
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Tabla de contenidos
Alimentos nocivos para gatos persas
Existen algunos alimentos nocivos para los gatos persas, por lo tanto, proporcionamos esta lista para que no los incluyas en la alimentación de tu gato.
Chocolate: la mayoría de los dueños de mascotas saben que el chocolate es peligroso para los perros. Pero, el chocolate es igual de tóxico para los gatos. El chocolate contiene metilxantinas que pueden provocar vómitos, diarrea, convulsiones y otros efectos secundarios aterradores.
Uvas y pasas: aunque no está claro exactamente por qué las uvas y las pasas pueden provocar daño renal en los gatos. A las pocas horas de consumir uvas o pasas, los gatos a menudo comienzan a vomitar, experimentar dolor abdominal y tener síntomas generales de letargo. Bajo ningún motivo incluyas estos frutos en la alimentación de tus gatos persas ni ninguna otra raza de gatos.
Cebollas, ajo y cebollín: estos alimentos pueden dañar los glóbulos rojos de su mascota, lo que eventualmente puede provocar anemia. En general, se necesita una gran cantidad de cebolla, ajo o cebollín para causar estos resultados. Pero, la mezcla de sopa concentrada o los polvos también pueden causar efectos secundarios peligrosos.
Huevos crudos: el consumo de huevos crudos puede provocar salmonela o intoxicación. Si un gato come huevos crudos, también puede consumir una enzima que puede provocar problemas en la piel.
Comida para perros:. Los perros y los gatos necesitan diferentes cantidades de nutrientes. La comida para perros contiene una cantidad mucho menor de vitamina A y taurina que la que necesitan los gatos. Sin estos nutrientes, los gatos pueden desarrollar enfermedades cardíacas y problemas de visión.
Leche: aunque las caricaturas nos llevan a creer que la leche es buena para los gatos, esto no es exactamente cierto. Los gatos a menudo tienen problemas para digerir la lactosa en la leche.
Alimentos saludables para gatos persas
Ciertamente es recomendable evitar alimentar a tu gato con comida para humanos. La comida comercial para gatos está hecha con el equilibrio adecuado de nutrientes que su gato necesita para mantenerse saludable. Pero, si deseas darles un capricho a tus gatos persas o hacer tu propia comida para gatos, hay algunos “alimentos humanos” que son saludables y puedes incluir en su alimentación.
Carnes: los gatos son carnívoros por naturaleza, lo que significa que deben comer carne para sobrevivir. Necesitan una gran cantidad de proteínas en su dieta para mantenerse saludables. La mayoría de los alimentos para gatos están hechos de carne, pero también puedes alimentar a tu gato persa con pollo, salmón, pavo, carne de res o conejo. Asegúrate de que la carne esté completamente cocida antes de ofrecérsela a tu gato y que no esté condimentada.
Trigo y avena: a tu gato puede no gustarle el sabor del trigo o la avena, pero estos son alimentos seguros y saludables que puedes ofrecerle. La avena es rica en vitaminas B y es una gran fuente de energía.
Manzanas peladas: las manzanas, como los plátanos, son otra fruta saludable que puedes incluir en la alimentación de tus gatos persas. Las manzanas son ricas en vitamina C y fibra. Solo asegúrate de quitar la piel antes de servir manzanas a tu amigo peludo.
Calabaza: la calabaza es una delicia saludable que es alta en fibra y baja en calorías. Además, la calabaza puede ayudar a aliviar los problemas digestivos de tu gato.
Espinacas: las espinacas ofrecen una variedad de nutrientes, como hierro, calcio y vitaminas C, K y A. Solo debes evitar ofrecer espinacas si tu gato tiene antecedentes de cálculos en la vejiga de oxalato de calcio.
Conclusión
Si planeas alimentar a tu gato persa con comida humana, recuerda limitar las cantidades que ofreces. Todavía debes confiar en la comida comercial para gatos, ya que está hecha con todas las vitaminas y minerales que el animal necesita para mantenerse saludable.
De hecho, hasta las golosinas como los arándanos o plátanos pueden hacer que tu gato aumente de peso y experimente problemas de salud. Es importante servir golosinas con moderación.
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